En Sevilla hay una torre curiosa, la Torre de los perdigones (gracias a mi primo Jose que es el que me lo cuenta).
Ahora está más bonita que en esta foto porque la han restaurado y han puesto arribita del to’ una cámara oscura.
Esto tiene que ser una pasada… pero lo que me llamó la atención en primer lugar es que el nombre del edificio tiene que ver con que allí se fabricaban perdigones por el curioso sistema de dejar gotear el plomo desde arriba para que cayera sobre agua en la parte inferior (como cuentan en la página oficial).
Los perdigones en su caída toman forma esférica como si fueran gotas de lluvia, porque las gotas de lluvia NO tienen esa famosa forma de lágrima con que las dibujamos, un típico error que casi todos hemos padecido.
Lamentablemente mi viaje a Sevilla tiene que ver con que ha fallecido un tío mío. Dentro de poco tiempo espero poder hablaros de él porque ha dejado un libro escrito (uno más) y os lo cuento en cuanto esté disponible. Que en Paz descanse y que siga feliz su camino, hasta la vista. Aquí nos queda su cariño, buenos recuerdos y su obra.
Siento lo de tu tío. Otra vez que vengas, me acerco a Sevilla. Por cierto, la torre está cerquita de casa de mis padres. Hace unos años la zona era de pena, ha quedado muy bien.
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Muchas gracias Eugenio. Lo tendré en cuenta para otra ocasión. Un abrazo
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Lo siento mucho Javi
Un abrazo
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Gracias Raúl
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Lo siento Javi. Un fuerte abrazo.
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Gracias compi… a ver si pronto os pongo un enlace a su libro que es bastante curioso.
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