El rosa no existe… ni el blanco tampoco

10 marzo 2023

Ya sabemos que cualquier percepción es subjetiva y se produce por la intervención de los sentidos y el procesamiento del cerebro. En ese sentido podríamos decir que ningún color existe en realidad, que todo es un modelo del mundo que nos hacemos en la mente… pero el caso del rosa, me refiero al «magenta», es diferente. Hablemos de colores.

Llamamos luz a una estrecha porción del espectro electromangético que somos capaces de percibir por los ojos, que en la imagen etá ampliada para ver los colores que la componen.

Fuente

Esto quiere decir que cuando hablamos de una luz amarilla, como las de las lámparas de sodio de las tradicionales farolas, estamos hablando de unas ondas electromagnéticas de una longitud de onda de quinientos y pico nanometros.

Esta es la realidad física. ¿Cómo la percibe la retina?

En la retina hay dos tipos de células fotorreceptoras, los conos y los bastones. Los bastones son más sensibles y son capaces de activarse en condiciones de baja luminosidad, pero no nos dan información sobre el color (por eso aquello de «De noche todos los gatos son pardos»). Los conos, en cambio, nos dan información sobre el color, aunque necesiten de cierta intensidad para poder funcionar adecuadamente.

Hay tres tipos de conos, uno sensible al rojo, otro al verde y otro al azul.

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Fijémomos en varias cosas:

  • La respuesta de cada cono es máxima para un cierto color, pero también se extiende a colores próximos
  • Los conos no son igual de «sensibles». Por eso una luz azul se percibe menos «brillante» que una amarilla de la misma intensidad
  • La curva discontinua sería la sensibilidad «total» de la retina que podéis ver está centrada en el verde-amarillo.

Olvidándonos de la sensibilidad relativa, para que veamos más claras las «mezclas», tendríamos esta gráfica

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Analicemos varios casos:

Nota: Cuando digamos conos rojos, verdes o azules, queremos decir conos sensibles a esos colores, no que sean de ese color)

¿Qué ocurre cuando miramos una luz roja o azul? Los conos de los otros dos colores no se activan demasiado y nuestro cerebro, interpreta que si viene luz del «canal» rojo, es que será roja, lo mismo para la azul.

¿Qué ocurre en el caso del verde? Como la sensibilidad de los conos verdes es más alta relativamente (recordad la gráfica anterior) de nuevo, la señal que llega al cerebro del canal «verde» es relativamente mucho más intensa y percibimos verde.

¿Qué ocurre si miramos una luz de entre 400 y 500 nm, de color «cyan»? En este caso al cerebro llegará información de dos «canales», el azul y el verde. El cerebro interpreta que cuando le llega información azul y verde a la vez, el color que debe haber en la realidad es el cyan.

De manera similar, si miramos luz amarilla, serán los conos verde y rojo los que más señal mandarán al cerebro, quien interpreta que si le llega información del canal rojo y el verde es que la luz debe ser amarilla.

ATENCIÓN, ENTONCES. MUY IMPORTANTE.

NO es que la «SUMA» de rojo y verde sea igual al amarillo. Es que mi cerebro PERCIBE igual una mezcla de rojo y verde que un color amarillo puro.https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/e/e0/Synthese%2B.svg/800px-Synthese%2B.svg.png

Físicamente UNA onda de luz amarilla es algo muy diferente a DOS ondas una roja y una verde. Es mi limitada percepción la que percibe ambas cosas iguales.

Así que esta conocida figura de los colores primarios y secundarios luz, no explica un proceso físico de mezcla de luces, sino la percepción que tenemos, dado que sólo poseemos tres fotorreceptores.

Fuente

De la misma forma, cuando se estimulan los tres canales de color, el cerebro nos da la sensación «blanco» que NO ES NINGÚN COLOR concreto. No existe una onda electromagnética que sea blanca. Mirad el espectro si no me creéis.

La luz que viene del Sol decimos que es blanca, porque así la vemos pero, en realidad son muchas ondas correspondientes a colores distintos, como se puede ver si la hacemos pasar por un prisma o miramos el arco iris.

Con lo que ya sabemos, os daréis cuenta de que, para verla blanca, no es necesario que una radiación tenga TODOS los colores del espectro, bastaría con que tenga los suficientes para estimular los tres conos (un poco de rojo, de verde y de azul).

Esto, que puede entenderse como una limitación, lo usamos tecnológicamente a nuestro favor a la hora de construir nuestras pantallas.

Cada uno de los puntos que las componen (pixeles) están a su vez compuestos por TRES pequeños puntos, uno rojo, otro verde y otro azul.

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Haciendo que cada uno de ellos brille con distinta intensidad, podemos conseguir que nuestro cerebro «perciba» todos los posibles colores… SIN que estemos en realidad produciendo esos colores. Insisto, en lugar de producir luz amarilla, damos luz verde y roja, y al cerebro LE DA IGUAL.

Como curiosidad fijaos también que el «defecto» del ojo para percibir puntos muy pequeños también trabaja a nuestro favor en este caso para que nos parezca que la pantalla es continua.

Y, para terminar, volvamos al título, ¿qué pasa con el magenta?

Si te fijas en la sensibilidad de los conos, verás que entre los tres «cubren» todo el espectro. De manera que los colores intermedios estimulan los diferentes conos en distinto grado. Así es lógico que el cyan aparezca con el estímulo del azul y el verde y el amarillo con la estimulación del verde y el rojo, pero… ¿y el magenta? ¿Cuál es el resultado de estimular los dos conos extremos SIN estimular el cono central? ¿Cuál es el color «todos menos el verde»?

La sensación, la percepción es el magenta. De acuerdo. Ve a mirar el espectro. No está. No existe. No hay ningún color puro de ninguna longitud de onda que sea magenta.

Al igual que el blanco, no hay una onda que sea blanca. Lo que hay es una «sensación» que se produce ante cierto estímulo. Si me activas los tres conos, la sensación es blanco. Si me quitas la componente verde (sólo estimulas rojo y azul), la sensación es magenta. LA SENSACIÓN.

Quiza os incomode, quizá cueste verlo al principio… pero es una interesante reflexión, sobre todo por lo que cuenta implícitamente: El mundo que percibo, el modelo de la realidad que se crea en mi cerebro, es tan estrecho como mi capacidad de percibir y procesar.

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Ni lo ves, ni te acuerdas…

4 febrero 2016

Lo que llamas percibir incluye, además de los límites de tus «sensores», la interpretación que hace tu coco. Por lo tanto, no es un fiel reflejo de lo que haya sucedido.

Por ejemplo

Logo Carrefour 1966

Fuente: Wikipedia

Quizá pienses que en este logo hay una C, pero en realidad hay algo así como una flecha azul y un triángulo curvo rojo… es tu encéfalo el que completa la C.

También se ha podido comprobar, en estudios, que la memoria se distorsiona y que es incluso posible inducir recuerdos falsos solamente conversando con alguien. Casos tan espeluznantes como víctimas que violación que recordaban al violador que… no fue.

Por lo tanto:

Lo percibido ha sido interpretado y, lo que recuerdas, reinterpretado cada vez que lo invocaste.

Ni una cosa ni la otra son un reflejo o un registro fiel de lo que haya ocurrido.
 


La expectativa es la principal causa de la decepción

6 diciembre 2010

Aquí os dejamos esta idea, similar a aquella de Groucho: El matrimonio es la principal causa de divorcio.

Una cosa es intentar cambiar lo que no nos gusta del mundo y otra muy diferente creer que las cosas son como en realidad no son, y esperar peras del olmo.


Abre los ojos y percibe el mundo sin prejuicios (ya os contamos que hasta jugando al parchís se conoce a la gente), después, actúa de acuerdo con la situación.

Imagen: wikipedia

P.S.: Que disfrutéis de los días libres los que los tengáis (en España celebramos hoy el día de la constitución)


¿Qué pensará del polvo blanco del lavabo quien limpie mi habitación…?

18 noviembre 2010

Cuando haya llegado alguien a limpiar mi habitación del hotel de Miranda de Ebro, supongo que habrá pensado algo feo del polvillo blanco que había en el lavabo (sorry, limpié todo lo que pude)

Aunque en lo referente al mundo «real» y «común», en la mayoría de las ocasiones, las cosas son justo lo que parecen (cariño, esto no es lo que parece… ya), desde el punto de vista filosófico y científico  la realidad es algo muy distinto de lo que parece. Sólo piensa que la materia está compuesta de átomos y que, por lo tanto, «tocarse» es imposible.

En el caso que nos ocupa… la realidad era algo muy diferente a las apariencias. A las siete de la mañana, el que suscribe, se veía preparando la famosa mezcla de agua y maizena para el megabolo que tenía en Miranda, de mano de la gente de la Caja de Burgos. Maizena…era maizena.

Dos sesiones de mi ya famoso show 😉 , con mi alter ego en la pantalla y yo mismo en directo, cada una con casi cuatrocientos chicos de primaria.

Ya estoy de vuelta, he sobrevivido, lo hemos pasado bien, me ha sorprendido que los chicos se acordaran de unas preguntas de mis libros que aparecían en su libro de lengua… y hemos llegado a la conclusión de que cuatrocientos quizá sean muchos por sesión… se volvían locos por salir voluntarios y se enfadaban un poco cuando no podían salir todos.

Mi agradecimiento a todo el mundo que ha tenido algo que ver en este rato, la gente de Caja de Burgos, los del teatro, los profes, los chavales…

También es curioso que gravito mucho últimamente por esa zona tan bonita entre Burgos, Álava y Cantabria, un poco antes del viviente y vivificador Cantábrico, no sé por qué será… yo sigo yendo donde me quieren.

Y termino con un comentario que le dejé a Héctor hace un tiempo y que creo muy cierto.

«Los científicos, filósofos y místicos coinciden en que la realidad no es lo que parece… en lo que no se ponen de acuerdo es en qué narices es»

 


GOL y SMS en Morse

3 noviembre 2010

Hace unos años tenía un compañero que había sido radiotelegrafista en un barco y me contó que, al tener habituado el oído, buscaba patrones en los sonidos casi sin querer.

Su entrenamiento le hacía ver cosas que a otros (por lo menos a mí) se nos pasan por alto.

El sonido que usan en Carrusel Deportivo es GOL en código Morse.

El sonido con el que se acopla el móvil cerca de un altavoz cuando te mandan un SMS también me parece que es código Morse (Tres puntos, dos rayas, tres puntos, casi SOS) y además era el aviso de los modelos Nokia de hace unos años.

Para los incrédulos científicos que quieran comprobarlo, aquí hay un traductor.

http://morsecode.scphillips.com/jtranslator.html

He intentado dar con lo que se oía cuando enseñaban el logo de RKO en las pelis antiguas (qué mayores estamos!) y es algo así como «una película de RKO» con unos códigos de inicio y fin, pero como yo no sé morse, y por internet no hay consenso en la frase exacta. lo dejamos para algún experto que nos comente.

Para los que se pregunten cómo se eligieron los códigos de cada letra, es tan sencillo como aplicar el sentido común: hagamos más cortas las letras más usadas. Esto se hizo para el idioma inglés, claro, y aquí tenéis un gráfico donde se ve muy claro.

Esto de buscar patrones es un asunto que tiene ocupadísimo a nuestro cerebro, una de las principales fuentes de ilusiones ópticas y el origen de este chiste viejito pero bueno… Un ciego coge un papel de lija y dice: ¿Quién ha puesto esta tontería?

 


Experimento: Percepción visual

12 febrero 2009

Este experimento es un clásico que podéis encontrar en Internet por todas partes.

Hacía tiempo que no lo recordaba, hasta que hoy lo he visto en el blog Ciencia en el siglo XXI. Mirando con la mente, que por cierto es tremendamente activo y muy variado. Aunque la versión que pondré yo es otra.

Se trata de ver hasta qué punto podéis mantener la atención y durante cuánto tiempo podéis llevar una cuenta sin equivocaros.

En el vídeo veréis a dos equipos pasándose balones. Tenéis que contar las veces que el equipo blanco (solamente el blanco) se pasa el balón entre ellos.

Lo tenéis que contar viéndolo solo una vez.

Hacedlo antes de seguir leyendo.

¿Ya está?

¿Trece?

¿Cómo que trece?

¿¿DE VERDAD NO HAS VISTO AL TÍO VESTIDO DE MONO QUE SE PASEA POR TODO EL MEDIO??

Vuélvetelo a poner…

Perdonad el engaño… la prueba no era para ver cómo contabais. Sino para comprobar lo altamente selectivo que es nuestro procesamiento de la información, en este caso visual.

Hace unos días un alumno me dijo que todos veíamos lo mismoNo puede ser más falso.

Como acabáis de experimentar, no siempre vemos lo mismo y, además, al interpretar lo que vemos a la luz de nuestros conocimientos, experiencia o cultura, en el fondo vemos realidades completamente distintas.

Cuando miras una habitación, ¿qué ves?

Un pintor no podrá evitar reparar en la calidad o colores de la pintura, un fontanero (saludos al Piri) en los radiadores, un fabricante de muebles en el mobiliario… y tú, según la vida que hayas llevado, mirarás aquí o allá.

Citando a Richard Bach en Ilusiones (actualizo la cifra): «Seis mil millones de personas viven en seis mil millones de mundos distintos».


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