¿Olvidamos que los «superdotados»…

… lo que más necesitan es desarrollar sus habilidades sociales y ser felices?

¿Y que eso no lo van a conseguir teniendo dos carreras con 15 años y compartiendo clase con chicos de 20, que están en un momento vital muy diferente al suyo?

¿Y que su mejor capacidad intelectual (o quizá sólo desde el punto de vista matemático-lingüístico) no debe condicionar su existencia, igual que la mejor capacidad física de un chico no debe anular el resto de los aspectos de su vida?

¿O es que en el fondo nos gusta un mundo de castas y clases separadas, sobre todo si intentamos asegurarnos un lugar en el «piso de arriba»?

Noticia sobre el «Bachillerato de excelencia«

19 Responses to ¿Olvidamos que los «superdotados»…

  1. Almudena dice:

    Y que, al menos en muchos casos, se aburren en el cole y que tampoco les vienen mal los retos intelectuales. Como a cualquier persona que desea aprender.
    Por otra parte, no creo que recibir ciertas «ayudas» en su formación (y no digo que el bachillerato de excelencia sea la solución perfecta) sea impedimento para llevar una vida social y afectiva normal. Los chavales que no cumplen ciertos objetivos repiten curso o clases de apoyo y eso no los condena a la soledad y la infelicidad.

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    • javierfpanadero dice:

      Hola Almudena. Por lo leído creo que ha ido estupendamente tu aventura marinera, me alegro. Y, ahora al grano, ya hay programas de apoyo durante los fines de semana, se contemplan actividades de ampliación, etc. No digo que estén atendidos como deben (ninguno de nuestros muchachos lo está) pero creo que esta iniciativa apunta peligrosamente a la separación y al aislamiento que a este tipo de chicos no les viene bien. Por otra parte, soy profe de secundaria, y soy plenamente consciente de que la integración absoluta dándole a cada uno lo que necesita es más una utopía que otra cosa, pero aún así la segregación a machete creo que no iría bien. Saludos

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  2. Falsirego dice:

    Con afirmaciones no se podría haber dicho mejor eso en lo que tú nos has hecho pensar con preguntas.

    Tienes toda la razón del mundo. Que dejen que los adolescentes puedan disfrutar de su adolescencia. Y que los años de trabajo en educación inclusiva e integración no se tiren a la borda con una ley ‘segregacionista’.

    Un beso fuerte y de nuevo enhorabuena por tu aniversario, por las visitas, por el éxito en la Casa del Libro… Estás que te sales.

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    • javierfpanadero dice:

      Sé que extremo el argumento… pero esto parece apuntar en la dirección equivocada. Muchas gracias, la verdad es que vamos hacia arriba. Un beso, Patricia, se te sigue.

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  3. Almudena dice:

    Sí, ¡gracias! El viaje fue estupendo. Aún me cuesta hablar de otros temas ;-).

    En cuanto al tema: No lo veo. ¿Por qué «los fines de semana»? ¿Por qué actividades adicionales cuando la formación principal, la que ocupa tantas horas cada día es insuficiente o insatisfactoria? ¿Por qué tener que perder el tiempo?

    Actualmente, por lo que sé, a los chicos superdotados se les ofrece hacer varios cursos en uno. Esto requiere también un programa especial y que sean los «bichos raros» (uno entre un montón haciendo algo distinto). Además, los centros pueden poner problemas en este sentido.

    Lo han llamado «bachillerato de excelencia», lo cual quizás enfoca el lado más «elitista» del proyecto, pero… yo qué sé: «bachillerato más difícil». Bachillerato donde no te regalan los 9. Bachillerato donde no te repitan por enésima vez la lección de matemáticas. En mi cole, los grupos de clases de inglés se dividían en varios niveles y no creo que eso «segregase» a la gente. Sólo se daba por hecho que los que sabían inglés no tenían por qué volver a aprender el «simple present».

    Ahora que lo pienso (y lo que voy a decir es muy políticamente incorrecto): sí existe un bahillerato «más difícil». La gente que hace la «doble vía» o bachillerato de ciencias en general, estudia asignaturas que se consideran «más difíciles». Ese bachillerato, al menos, se considera más exigente y sus alumnos, más inteligentes. Ello no los convierte en bichos raros. Vaya, no más raros de lo que eran sacando sistemáticamente 10s en física cuando sus compañeros se pelean por el 5.

    Lo que personalmente me chirría de esta medida es que sólo se curse en un centro. Un edificio. Como un gueto. Eso es lo que sí puede dar grimita.

    Por lo demás, y en cuanto a «dejar a los adolescentes vivir su adolescencia»: supongo que nadie será obligado a cursar este bachillerato si no lo desea. No tendría ningún sentido.

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    • javierfpanadero dice:

      Casi cualquier idea puede funcionar bien con buena voluntad. El problema que yo veo es que no la percibo en esto, creo que es buscar de nuevo «nosotros» y «ellos». Uno de los aspectos claves es el edificio, como dices.

      Está claro que hay que estimular a cada uno en la medida de sus posibilidades y que eso se puede hacer separando a la gente por niveles… en la práctica todo es complejo y es fácil caer en «café para todos» o en elitismos.

      Sé que extremo un poco el post, pero en estos chicos me parece mucho más importante aprender a gestionar sus emociones, su capacidad de adaptación, su tolerancia a la frustración, en ocasiones la persecución incesante de desafíos o conocimientos sobre un fondo de insatisfacción, etc. etc. que el hecho de que aprendan un idioma más o una asignatura más, porque eso les hará mucho más felices que esto último.

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  4. Almudena dice:

    No creo que sea incompatible lo que dices con tener una formación más exigente.
    Ni que el hecho de estudiar el mismo bachillerato que estudian todos vaya a facilitar que gestionen mejor sus emociones y demás. Anda que no habrá «empollones» excluídos, humillados, aburridos o mirados con recelo.
    Sin duda, lo más importante, antes que su formación, es su bienestar o «felicidad». Pero no sé por qué recibir una educación estándar debería ser la clave para ello.

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    • javierfpanadero dice:

      No es tanto que la educación estándar les haga felices como que esa propuesta les haría menos felices. No son cosas incompatibles como dices, pero creo que los aspectos que señalo están más descuidados que los otros, y si focalizamos más aún ahí, iremos a peor.

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  5. Hola Javi

    Vaya, se nota que nos has tocado la fibra a los profes…ese es un tema delicado…

    ¿Pero no estamos todos ya realizando atención a la diversidad en las clases? A mi me parece correcto realizar un bachillerato mas exigente, pero no solamente a los que sacan mas de 8 de media en la ESO. Para todos. ¿No es una enseñanza postobligatoria?

    Realizar un bachillerato fácil y un bachillerato difícil no conlleva a nada. Los que habrán hecho el fácil caerán como moscas en la selectividad y en la facultad y no será una ayuda para ellos, sino una pérdida de tiempo. Se ha de realizar un bachillerato de calidad para todos. Exigente y completo. No se porque razón se ha «ESOsizado» el bachillerato, parece que todo el mundo tenga que realizarlo. No creo que sea bueno para la sociedad tener millones de licenciados e ingenieros haciendo cola en el INEM. Se ha de potenciar la formación profesional. Hace mucho tiempo que se dice y no se hace…

    Ay…hay tantas cosas que cambiaría del sistema educativo español…pero es el que hay, que le vamos a hacer…:)

    Saludos

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    • javierfpanadero dice:

      Y las noticias que llegan de la universidad es que también se ha ESOsizado… A mí se me cuela otro discurso, en el que ya no somos tan idiotas de jerarquizar a las personas por sus posesiones materiales, pero lo hacemos por sus «posesiones intelectuales». Creo que hay un error de fondo en esto. Se percibe en cosas como que te pregunten tu CI nada más conocerte en algunos círculos, o que la gente se presente como doctor, o licenciado en… Ya me meteré en ese follón otro día… pero insisto en que algunos chicos estupendos con altas capacidades con los que tengo trato, tienes necesidades más que ver con su «espíritu» (permitidme) que con sus necesidades de desafíos intelectuales.

      Pero la gran ventaja de todo esto es que… mi foto de la nariz ha pasado desapercibida 😉

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  6. De eso nada. Tu foto con la nariz de payaso creó un gran impacto, pero todavía nos estamos recuperando…:)
    Te la propongo como contraportada de tu próximo libro…

    ¡¡Saludetes!!

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    • javierfpanadero dice:

      No te creas, la pensamos para la solapa de Cómo le explico esto… pero como el libro tiene un punto de humor, pero en el fondo trata temas bien profundos, no queríamos que la gente pensara que era un libro de chistes… aunque los tenga… y muy buenos algunos…

      Estamos intentando ir por BCN para San Jordi, el 23, pero se está poniendo difícil. Si al final voy te lo digo por si tenemos la ocasión de echarnos un café, compañero.

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  7. Me encantaría, Javi. Avísame!

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  8. Evangelina dice:

    Hola a todos;lo del bachillerato de excelencia, me recuerda a mis años de facultad donde los paladines del Opus,Opus Dei,claro, iban captando a los mejores alumnos de los distintos grupos, para meterlos en la «organización. Los que aguantaban el tirón al final acababan siendo profesores´, investigadores del Opus y vivían por y para la «obra». Esto lo veo un poco igual, los mejores alumnos para formarlos y trabajar luego ¿dónde?,… ¿en las mejores empresas?.. pero ..¿de quién?. Hay alumnos muy inteligentes en la Eso, que probablemente no saquen una maravillosa nota, quizás por falta de madurez o de intereses, pero que dan un salto importante en bachillerato.Con estos ¿qué pasa? No hay «»excelencia» por no haber estado más listos en la ESO..Ah !y que me perdonen los de la «obra».Saludos

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  9. Kojio dice:

    Hola Javier, te comento porque soy (o más bien fui) uno de esos niños «superdotados» de los que hablas, lo pongo entre comillas porque realmente no me considero «super», aunque algunas de mis capacidades intelectuales sean más amplias de lo normal la verdad es que siempre he llevado una vida bastante mediocre en el sentido académico y una vida pobre en el ámbito social.

    Nunca me trataron de forma diferente en clase ni fui a clases especiales a pesar de las señales que daba, ni tampoco trataron demasiado que tuviera relación con el resto de los niños, simplemente era uno más.

    Se puede decir que aprender, para mí, nunca ha tenido nada que ver con la educación académica, y considero que habría sido distinto si se me hubiese motivado de forma diferente porque, aunque sea inteligente, un niño no tiene porque saber ni querer priorizar ningún aspecto de su vida, es decir, por mucho que pueda aprender, no sabe ni entiende que no todo el conocimiento adquirible es igual de útil para un posible futuro, simplemente aprende lo que sea.

    Hoy en día se un montón de cosas que, por simple curiosidad, he aprendido con los años y fuera de instituciones académicas, y se puede decir que soy una persona culta, y que puedo relacionarme con el resto de las personas de forma bastante normal (aunque siempre con un halo de timidez extrema alrededor) y, es ahora, con veintipocos años, cuando soy mi propio motivador personal y soy capaz de incitarme a estudiar temas que me pueden aportar utilidad en un futuro inmediato o a largo plazo. Pero antes de eso he gastado mucho tiempo probando cosas (experiencias, aficiones, procrastinación en general) que me han llamado la atención pero que realmente no me aportaban nada de lo que ahora me gustaría haber aprendido.

    En resumen, se bastante de mucho, y me encanta poder manejar tanta cantidad de información, pero sinceramente me hubiese gustado que alguien hubiera administrado de alguna manera toda esa información que hoy tengo, porque, quizás así, hoy no sería «mantequilla untada en demasiado pan».

    Como conclusión, decir que solo pasé la ESO, por simple decisión de no querer repetir y con notas suficientes por puro desinterés de cualquier tipo de éxito académico, no tengo carrera universitaria, he llevado una vida «callejera» con bastante libertad de acción, y aun así nunca he descuidado mi curiosidad por el funcionamiento las cosas en general, por observar y comprender a las personas y a mí mismo, etc., pero no puedo decir que mi inteligencia no haya condicionado mi existencia, lo ha hecho, de la misma forma en que el motor de un coche condiciona su rendimiento, y aunque mi motor era bueno, como autopiloto no puedo decir que lo haya hecho bien del todo, desearía y creo que debería haber sido copiloto durante los primeros kilómetros del camino, acompañado y aprendiendo de un buen piloto.

    Espero haber ampliado el campo de visión sobre el asunto con mi experiencia personal, sabiendo que solo es mi caso particular y para nada una realidad general.

    Saludos!

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    • javierfpanadero dice:

      Muchas gracias por tú interesantísima aportación.estás personas estás descuidadas desde hace mucho y han sobrevivido como han sabido.ahora hace falta ver como y con que recursos se les atiende.que sigas encontrando luz y paz en tú camino.un abrazo

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      • Kojio dice:

        No hay de qué! 🙂 por cierto, me gustó mucho tu blog, ya hace un tiempo que lo tengo en favoritos, sobre todo los experimentos, aunque por lo que veo en los posts más vistos no soy el único al que le gustan!

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  10. […] Insisto una vez más en que, en mi opinión, olvidamos que lo que más necesitan nuestros alumnos de altas capacidades es aprender a gestionar su don de manera integrada con sus emociones, antes que hablar cuatro idiomas o tener dos carreras, y que la mejor manera de hace esto no es separándolos del mundo. En cualquier caso… […]

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